Mendigos de versos

Mirada perdida, desolada actitud, de los que sabían que no importaba que su hacer, fuese o no de agradecidos importados honores, camino prieto, cafe agrio, vino amargo, y cartas con mano arriesgada, en la mesa del infortunio apostando a doble o nada, y si al parecer está olvidado el disco rayado, que dio sentencia cuando pasabas a su lado, a no dejar una moneda en su saco, dejate de royos, morales laborales, y sigue tu camino, sin pararte a escuchar su literatura callejera.

No hay comentarios: