DATURA

Las palabras le siguen al desfallecimiento, muy cerca de donde todo termina se ahogan. Como si estuvieras en el umbral de la vida a un paso de la ausencia. Tú querías saber que era no estar, tu cuerpo se retuerce por vivir, todas las promesas de desaparecer ya no tienen importancia, crees que todo acabará, y dispuesta al desastre tu alma esquiva la divinidad, solo un pozo oscuro hay y ya tiene tus pies. Llega un rayo que revuelve tus adentros y tu respiración regresa como vómito de vida. Has estado cerca. Vuelves. Ya nada será tan grave, nada será tan intenso. Pero estuviste allí. Y las sombras del terror te acompañarán por los restos.

1 comentario:

Literauta dijo...

De mayor, yo quiero escribir como tú.