Vientos que esparcen mis cenizas hacia el opaco horizonte que espera
la llama ha consumido el rostro y la palabra
del lápiz que te escribía no queda nada,
las manos que te buscaban en la noche rezan unidas por la muerte.
Llegará, llegará la sombra. Antes de que renuncie al miedo de perderte, de perderme.

1 comentario:

peyote dijo...

Perder; no tiene importancia. perderse; es lo mismo. Al final.

No creo en tus palabras ni en tus dibujos. al finla ceer es leer.
Por eso me gusta este blog.

Es una bofetada y soy la clase de sujeto, que predica sin ser visto.
Soy confundido con el "predicado" y siempre hay otro sujeto vestido con mejores ropajes que los mios.

A mí el mundo no me interesa.
Me interesaba el mundo; poequé sigo creyéndo en la cchica con la que vengo soñando des que soy niño.

Y ahora que he mueto cómo niño.
No tengo animos de quedarme en un sitio. Tengo la frente lista para recibir el impacto.