vuelvo a ser el fin de la pregunta o la pausa de la orquesta
vengo de donde estuve para recordar lo que hizo que dejara olvidados los recuerdos
y vuelvo con una luna de menos creciendo en mi lengua
y los inviernos decoran la habitación apagada como las ortigas en boca de zanja,
tenía una gallina que no huía de mí cuando era peligrosa, ahora sus huevos son gritos de porcelana que guardo junto a lo que espero de los destornilladores
le quito el polvo una vez al año y luego paran las olas de romper en mi desvelo
y una alucinación sueña en descansar por una vez, descansar, descansar

1 comentario:

mateosantamarta dijo...

DESCANSAR DE TODO LO INNECESARIO. Descansar en la esencia. Un abrazo.
La mente es una mentirosa.